El gobierno ha denunciado que los menores que fueron deportados desde Estados Unidos hacia Colombia sufrieron abusos y maltratos por parte de las autoridades migratorias estadounidenses durante su repatriación.
En horas de la mañana de este miércoles, 29 de enero, Colombia recibió el tercer vuelo de connacionales deportados de Estados Unidos, luego de las órdenes dadas por el presidente de esa nación, Donald Trump.
El vuelo, procedente de San Diego, California, trajo consigo al menos 105 colombianos deportados, entre los que se encontraban casi 21 niños, que también habrían sido víctimas de maltratos por parte de las autoridades estadounidenses
Según las autoridades colombianas, los niños habrían enfrentado condiciones inhumanas, que incluyen trato cruel y negligencia durante el proceso de deportación. La denuncia ha generado un llamado a la comunidad internacional para que se tomen medidas ante las violaciones de derechos humanos sufridas por los menores.
Así lo denunció el Gobierno Nacional, a través de la directora del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), Astrid Cáceres, quien mencionó que se recibieron quejas sobre los malos tratos sufridos por los niños, quienes, según las denuncias, fueron encadenados antes de ser enviados de regreso al país.
